Iglesia prefabricada sustituirá parroquia Cristo Rey durante próximos años
La de Cristo Rey era la única parroquia del barrio de La Viña y, aunque sufrió daños por los seísmos, su derribo fue ordenado por el Ayuntamiento después de que parte de un edificio contiguo en riesgo de colapso estructural se desplomara sobre ella en el momento en el que los operarios iniciaban los trabajos para su demolición controlada.
Los módulos prefabricados ya han comenzado a ser instalados en el interior del recinto del parque de La Viña, junto a una fuente, y está previsto que los trabajos finalicen el próximo miércoles.
El objetivo del párroco de Cristo Rey, Juan José Sánchez, es recuperar la actividad de la parroquia con esta iglesia modular el próximo fin de semana, aunque el parque de La Viña acogerá mañana domingo una misa de campaña al aire libre, el primer oficio religioso del barrio tras los seísmos.
Según lo previsto inicialmente, las instalaciones provisionales del templo se mantendrán unos dos años, en los que bautizos, bodas, comuniones y funerales del barrio, junto a las eucaristías habituales se celebren en este escenario.
Los daños en el patrimonio religioso de Lorca superan los 15 millones de euros y, entre las iglesias más dañadas, se encuentra la de Santiago, del siglo XVIII, que ha quedado reducida a ruinas al desplomarse toda su techumbre sobre la nave central y las laterales.
También presentan daños muy importantes las iglesias de Santo Domingo y San Francisco, sedes religiosas de las dos principales cofradías de la Semana Santa de la ciudad y el santuario patronal de la Virgen de las Huertas.
El convento de Santa Ana y Santa María Magdalena; San Mateo, sede de la Vicaría Episcopal; San Diego; San José y El Carmen son otras iglesias de Lorca cerradas al culto desde el día de los terremotos. EFE 1010091
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